El encuentro consistió en el enfrentamiento de dos equipos capitaneados por Steven Gerrard y Jamie Carragher. Xabi fue reclutado por el capitán Gerrard y Arbeloa formó en en once de Carragher.
El partido terminó con empate (2-2), aunque lo más importante fue que cumplió el objetivo solidario con el que se había organizado, además de ser una tarde llena de emociones y reencuentros con muchas leyendas que jugaron en el Liverpool y ahora están retiradas o juegan en otros equipos.
Además, Arbeloa entregó a Steven Gerrard un presente del Real Madrid (una réplica del estadio Santiago Bernabéu) en reconocimiento a su carrera profesional en el Liverpool, que termina esta temporada.